Hija de Juan De La Cruz Montoya y María Dolores Upegui, nacida el 26 de mayo de 1874 en el municipio de Jericó, departamento de Antioquia, lugar que hoy día goza el privilegio de tener a la primera Santa Colombiana.
Dado el asesinato de su padre a sus cortos dos años de edad, su madre se vio en la necesidad de trabajar como docente de religión, razón por la cual María Laura viajo junto con su madre al municipio de Donmatias en donde vivieron algún tiempo, pero con la difícil situación que se veía en esos tiempos fue enviada a un hogar de huérfanos dirigido por su tía María de Jesús Upegui conocida religiosa y fundadora de la comunidad de Siervas del Santísimo y de la Caridad, allí fue donde en realidad empezó su vida como religiosa a los 11 años.
Estudio en el colegio del Espíritu Santo, desde los 16 años fue catedrática en varias instituciones educativas católicas, y así mismo se graduó como maestra elemental consagrándose a educar jóvenes guiados por la fe católica, pero a los 39 años entregó el resto de su vida al apostolado y las misiones, de este modo alfabetizo indígenas y fundó la Congregación de Misioneras de María Inmaculada y Santa Catalina de Siena.
Con esta breve introducción comenzamos nuestra crónica que tiene como eje principal a la primera santa COLOMBIANA María Laura de Jesús Montoya Upegui, por quien llegamos a la discusión de si es debido catalogar o no como santo a un ser humano que como todos no solo tiene pecados en sus actos sino también en sus pensamientos.
En las diferentes opiniones suministradas por el periodista Indalecio Castellanos, quien tuvo que cubrir la noticia de la canonización el 12 de Mayo desde las 4 de la mañana para RCN la radio, indica que “los santos son figuras puras, castas y serviciales” también recalco que fue “una mujer devota, sana, una mujer que tenía mucho poder, que cumplió con los estándares de una santa, y mal haría el en no estar a favor de este tipo de actos que la iglesia realizó a una gran Colombiana”·
Por su parte el periodista Jairo Tarazona resalta que la Iglesia dice que “para ser santo se tuvo que haber ayudado y sacrificado toda una vida, se tuvo que haber tenido una vida religiosa y por más que sea todos tenemos pecados porque eso es normal desde el momento en que nacemos todos tenemos el llamado “pecado original”.” Y por ende declara que “Semánticamente es una santa porque cumplió todos los requisitos, porque fue beatificada, porque ayudo al prójimo, porque siguió a Dios, porque cumplió todo el proceso y al final mucha gente testifico que hizo milagros” .
“Solo hay un Dios pero santos hay muchos”
Opinión dada en la entrevista por el periodista Jairo Tarazona.
Los santos existen porque los mismos seres humanos los creamos, y la canonización de la Madre Laura se vivió como un acto de nacionalismo ya que como se ha recalcado es la primera santa Colombiana y para los fieles de la Iglesia Católica es un suceso único de llevar en la memoria y de destacar todos los días.
Por: Yineth Farias
Dado el asesinato de su padre a sus cortos dos años de edad, su madre se vio en la necesidad de trabajar como docente de religión, razón por la cual María Laura viajo junto con su madre al municipio de Donmatias en donde vivieron algún tiempo, pero con la difícil situación que se veía en esos tiempos fue enviada a un hogar de huérfanos dirigido por su tía María de Jesús Upegui conocida religiosa y fundadora de la comunidad de Siervas del Santísimo y de la Caridad, allí fue donde en realidad empezó su vida como religiosa a los 11 años.
Estudio en el colegio del Espíritu Santo, desde los 16 años fue catedrática en varias instituciones educativas católicas, y así mismo se graduó como maestra elemental consagrándose a educar jóvenes guiados por la fe católica, pero a los 39 años entregó el resto de su vida al apostolado y las misiones, de este modo alfabetizo indígenas y fundó la Congregación de Misioneras de María Inmaculada y Santa Catalina de Siena.
Con esta breve introducción comenzamos nuestra crónica que tiene como eje principal a la primera santa COLOMBIANA María Laura de Jesús Montoya Upegui, por quien llegamos a la discusión de si es debido catalogar o no como santo a un ser humano que como todos no solo tiene pecados en sus actos sino también en sus pensamientos.
En las diferentes opiniones suministradas por el periodista Indalecio Castellanos, quien tuvo que cubrir la noticia de la canonización el 12 de Mayo desde las 4 de la mañana para RCN la radio, indica que “los santos son figuras puras, castas y serviciales” también recalco que fue “una mujer devota, sana, una mujer que tenía mucho poder, que cumplió con los estándares de una santa, y mal haría el en no estar a favor de este tipo de actos que la iglesia realizó a una gran Colombiana”·
Por su parte el periodista Jairo Tarazona resalta que la Iglesia dice que “para ser santo se tuvo que haber ayudado y sacrificado toda una vida, se tuvo que haber tenido una vida religiosa y por más que sea todos tenemos pecados porque eso es normal desde el momento en que nacemos todos tenemos el llamado “pecado original”.” Y por ende declara que “Semánticamente es una santa porque cumplió todos los requisitos, porque fue beatificada, porque ayudo al prójimo, porque siguió a Dios, porque cumplió todo el proceso y al final mucha gente testifico que hizo milagros” .
“Solo hay un Dios pero santos hay muchos”
Opinión dada en la entrevista por el periodista Jairo Tarazona.
Los santos existen porque los mismos seres humanos los creamos, y la canonización de la Madre Laura se vivió como un acto de nacionalismo ya que como se ha recalcado es la primera santa Colombiana y para los fieles de la Iglesia Católica es un suceso único de llevar en la memoria y de destacar todos los días.
Por: Yineth Farias